jueves, 5 de diciembre de 2013

Ludi Romani I


Llamados Ludi Romani o Ludi Magni, los Juegos Romanos procedían de una fiesta del vino que la plebe celebraba en septiembre en honor del dios Liber. Llegaban a durar dieciséis días, y eran ofrecidos a Júpiter Óptimo Máximo a principios de septiembre.


Con motivo de la próxima edición del juego (con el nombre provisional de GLADIATORIS), de la mano de Peká Editorial, hemos empezado a repasar las partidas del Libro de Juegos. La mayoría las escribimos entre 2009 y 2010, por lo que se han quedado anticuadas, lentas, aburridas y poco jugables. ¡Hay que jugarlas de nuevo y actualizarlas!
Juegos Romanos I: Comienzan las Fiestas. Para empezar este repaso, Luis y yo invitamos, el 28 de noviembre, al actual gran campeón Juan Carlos (aka Celtibero Victor): es el ganador de la final de la Ludi Pucelae 2012, y ha quedado invicto y segundo clasificado en la Ludi Pucelae 2013 (cuya final no va a poder disputar). Además, jugará con los recientemente mejorados Sin Escudo (azules).
Primera Prueba: Batalla entre Esclavos. Participan 4 Esclavos de cada jugador, y hay trampas de Foso con los CRONOS. Son demasiados Esclavos,  empiezan muy lejos (en sus puertas), y el jugador impar controla 4 Esclavos grises de Nivel II (horrible, hace años que no jugamos batallas con impares) por lo que empezamos a hacer correcciones desde el primer turno. Juan Carlos y yo contra Luis, con la ventaja de los Esclavos III azules (aunque los naranjas tienen su Médico). Después del primer encontronazo, mis verdes huyen patéticamente, tirándose al Foso y todo, para aguantar el final de la prueba con al menos un luchador en pie. Empatados.
Segunda Prueba: Gladiadores contra Fieras. Nos sorprende que no sigan las trampas de Foso en los CRONOS (otra corrección futura). Gana el jugador que mate el mayor número de luchadores y, lo que era un empate a dos bandas entre Acróbatas y Escudos Pequeños, los dioses decantan por el Contrarretiario en el último turno, por lo que Luis se lleva las dos palmas.

Tercera Prueba: Lucha de Casernas y Bárbaros. Con el CRONOS, aparecen 4 Bárbaros grises, algo que tampoco nos gusta mucho, pero que era habitual en los comienzos del juego (última corrección). Juan Carlos cede a los perversos consejos de Luis, y ambos se lanzan contra mis verdes, arrinconándolos junto a mi puerta. Y eso que yo era el único que había sacado un "1" en el sortitio (de mi Provocator III, que se queda en casa).
Viendo la partida perdida (los Acróbatas van a entrar en combate cuando ya nos hallamos vapuleado azules y verdes mutuamente), todos mis luchadores arremeten contra los Sin Escudo, y cosechan un buen número de piezas. Hay algún ataque impresionante, como el palazo del Contrarretiario III que machaca, de un golpe, a mi Hoplómaco I intacto. Al menos, los Parmularii cumplimos nuestro objetivo secundario, y obtenemos más de 4.000 ss por bajas enemigas:

Luis Valleaguado (Acróbatas): 27.600 ss
David (Escudos Pequeños): 4.200 ss
Juan Carlos (Sin Escudos): 900 ss

Luis arrasa al cosechar 5 palmas. Pero Juan Carlos prueba la desconocida derrota (merecida, por hacerle caso a las lenguas viperinas). ¡Salud!

2 comentarios:

Thraex dijo...

Todo falacias.
En la última prueba Luis no abrió la boca. Juancar se lanzó hacia David por motu propio, y Luis fue hacia la refriega por el lado más corto (como se aprecia en las fotos).
Allí los verdes habían hecho una barrera impidiendo entrar a los azules, pero impidiendo también que los Acrobatas llegasen a los azules. Por lo tanto atacaron a los verdes.
Ni "lenguas viperinas", ni nada.

David Temprano dijo...

Ja ja ja. Ambos tratamos de manipular a Juan Carlos, y lo consiguió Luis (que intenta refrendar sus palabras contestando desde nuestro gmail compartido de Gladiadores). Yo, al menos, reconozco que siempre intento manipular al contrario. Pero en este caso, la diferencia era ir contra un jugador con dos palmas y todo a Nivel III, y otro sin palmas, Fieras y Esclavos II y Gladiadores III y ¡I! Juan Carlos optó por el camino fácil, y los verdes vendimos cara nuestra vida. ¡Arriba Parmularii!